Add parallel Print Page Options

Hubieras podido, en batalla campal,
poner a los impíos en manos de los justos,
o aniquilarlos en un solo instante
por medio de fieras salvajes,
o con una severa orden de mando;
10 sin embargo, para darles oportunidad de arrepentirse,
los castigaste poco a poco,
sabiendo que eran malos por naturaleza
y perversos desde su nacimiento,
y que nunca cambiarían su modo de pensar,
11 porque eran una nación maldita desde el comienzo.

Razones de la moderación divina

No fue por miedo a nadie
por lo que dejaste sin castigo sus pecados,

Read full chapter